Desde mediados de noviembre contamos con la nueva entrega de la exitosa saga de rol desarrollada por Bethesda. Ambientada en el post-apocalíptico mundo abierto de la ciudad de Boston y sus alrededores, cuenta con una historia buena, un sistema de combate mejorado, una recogida de elementos potenciada al necesitarlos para la construcción de asentamientos todo ello con una ambientación estupenda. Pon todo esto nos enfrentamos a uno de esos juegos al que podemos dedicarle horas y horas en las que siempre vamos a hacer algo interesante si nos dejamos seducir por la profundidad de lo que nos ofrece.

 

Historia

Iniciamos el juego configurando el género, aspecto y características de nuestro personaje antes de ver como su apacible vida se ve interrumpida por el inevitable apocalipsis nuclear. Ya en el refugio más cercano, una serie de circunstancias nos adentran en el juego propiamente dicho, situándonos más de doscientos años después y sin saber exactamente qué ha sucedido. Nos enfrentamos a una serie de misiones principales que nos van revelando lo acontecido durante nuestra “ausencia”. Según realizamos estas misiones se nos abren otras historias paralelas que podemos ir realizando a nuestro antojo. La estructura del juego permite una gran libertad a la hora de elegir que hacer, por lo que incluso se puede dejar de lado la línea principal si no nos convence y realizar las misiones correspondientes a una de las facciones existentes con las que nos encontraremos.

 

A tener en cuenta: No es necesario haber jugado a las entregas anteriores pues la historia es independiente. Sí que existen ocasiones en las que los conocimientos y habilidades adquiridas en anteriores entregas ayudan, pero equivocarse y tener que intentarlo de nuevo hasta salir airoso es parte del proceso de aprendizaje y disfrute.

 

Con una historia principal buena se echa en falta más detalles a la hora de contarla al que no ayuda el sistema de diálogos que se queda corto en posibilidades.

 

Jugabilidad

El objetivo del juego es la supervivencia, que se puede afrontar en primera o en tercera persona y de diversas formas. El combate es algo que no podremos evitar, con un sistema mejorado que no hace obligatorio en esta entrega el uso del asistente V.A.T.S. aunque ayuda. Toda la experiencia que se consigue permite ir mejorando los siete atributos principales de nuestro personaje, además de la posibilidad de desbloquear capacidades especiales dentro de cada una.

Una de las novedades del juego radica en la posibilidad de creación de objetos y gestión de asentamientos pues nos hace meternos de lleno en el papel de un superviviente. El mundo está plagado de objetos que podemos descomponer y usar para crear lo que necesitemos o mejorar otros objetos. Todo esto lo podremos hacer en los asentamientos. De esta forma se hace imprescindible gestionar muy bien el inventario pues el peso de lo que podemos transportar es limitado. Estos asentamientos son pequeños poblados que podemos mejorar para conseguir atraer a colonos, lo que nos proporcionará recursos y beneficios.

 

A tener en cuenta: Es la entrega que menos peso tiene la parte de rol y más se acerca a un shooter pero como ofrece una gran libertad de decisión, al final podemos dedicarle la importancia que queramos a la evolución, la exploración, la gestión de recursos o la recolección y creación, según sean nuestros gustos.

 

La libertad que ofrece permite que juguemos de la forma que más se adapte a nosotros, lo que unido a su tamaño y densidad hace que tengamos por delante todas las horas  de diversión que estemos dispuestos a dedicarle.

 

Ambientación

El Yermo post-apocalíptico al que nos enfrentamos es enorme y muy variado, con una iluminación esplendida, elementos atmosféricos muy logrados y una banda sonora espectacular, adaptándose a las situaciones de cada momento con maestría. Cabe destacar la ciudad de Boston con todas sus zonas identificables a pesar de la destrucción, a una escala muy realista que sobre todo luce cuando disponemos de una vista elevada. El cuanto a los personajes hay que reconocer que no están a la altura, no tienen expresividad, sus animaciones son toscas, sin carisma y su doblaje al castellano mejorable, sobre todo en cuanto a calidad.

 

A tener en cuenta: El rendimiento general es bueno. La gran cantidad de elementos en el mundo parece la causa de una excesiva división de los escenarios, necesitándose tiempos de carga entre unas y otras que hace perder puntos en cuanto a inmersión en el juego.

 

La atmosfera que nos rodea nos sumerge plenamente en el juego con el único objetivo de sobrevivir en el basto mundo que nos rodea.

 

Artículo originalmente publicado en www.carrefour.es